¡Aleluya!
Después de cinco fechas se pudo sumar de a tres ante un rival durísimo.
¡Feni nomá! Al fin salió ese grito que teníamos adentro. Después de cinco fechas se pudo sumar de a tres ante un rival durísimo. Obvio que se sufrió, pero el que pensó que esto iba a ser fácil no entiende nada.
Si a cualquiera de nosotros nos dicen “vas a ir ganando 1-0 y el rival se quedará con 10 en el primer tiempo” firmamos sin pedir muchas explicaciones.
Cuesta pensar que después de un 3-0 uno comience hablando de la defensa en vez de destacar la contundencia ofensiva. Pero en Florida el partido se ganó de atrás hacia delante, tal como le gusta a Rosario.
La tarde pintaba preciosa, Cavallini volvió al gol y El Tanque perdió a una de sus figuras por una expulsión en la primera parte. Sin embargo, lejos de liquidar el partido, nos tocó aguantar. Y aguantamos. La defensa que tantas veces se vio vulnerada aguantó. Mejía (quien se merece una columna aparte) bancó todo lo que le patearon al igual que los zagueros que sacaron cada pelota que cayó en el área.
El cero en nuestro arco, premisa clave del entrenador, sostuvo el resultado hasta que sobre el final del partido, con el ingreso de Medina, se liquidó el tramite.
Y es del “Cacique” sobre el que me voy a detener. “Es viejo”, “Está de vuelta”, “No quiere nada”, “La vino a robar”. Estoy seguro que alguno escuchó una frase similar cuando llegó a Fénix.
No ligó nada al comienzo. Una enfermedad no le permitió estar dentro del campo de juego y lo tuvo afuera mucho tiempo. Pero les puedo asegurar que un tipo como el “Cacique” suma más allá del lugar donde le toque estar.
Cuando le tocó jugar de volante de contención lo hizo sin chistar, cuando le tocó quedar afuera por su problema de salud donó su sueldo para las formativas y se mató entrenando para recuperarse. Y no es un “Don Nadie” ni es hincha de Fénix, es un tipo campeón uruguayo, que jugó en España y que hoy está en nuestro cuadro para demostrar que aún está vigente.
Por segundo partido se mantuvo el arco en cero y por primera vez en el campeonato afrontamos el próximo partido con la tranquilidad que genera una victoria.
Está claro que falta mucho y que vamos a tener que transpirar mucho para seguir en primera. La actitud está, los jugadores también. Nosotros, los hinchas, tenemos que apoyar y pase lo que pase, a la hora de pasar raya cuando termine de rodar la pelota, quiero tener la tranquilidad de que cada uno dejó todo desde su lugar para cumplir el objetivo.
¡No Baja!