El esfuerzo no alcanzó
Al igual que contra Juventud, se nos escapó el resultado sobre el final.
A pesar del sacrificio, el orden táctico, y la actitud volvimos a quedarnos con las manos vacías y nos fuimos masticando bronca y puteando al escuchar los resultados en las otras canchas.
Al igual que contra Juventud, se nos escapó el resultado sobre el final. Ese córner ante River, esa pelota maldita que se metió en nuestro arco luego de un rebote significó un castigo enorme si tomamos en cuenta como se dio el partido.
Hay jugadores con los que uno se emociona al verlos en la cancha. El sacrificio de Liguera, la garra que le pone el “Cacique” Medina a cada pelota, la regularidad de Juan Álvez y lo que mete Gonzalo Papa en el medio son algunos ejemplos del compromiso que tiene este plantel.
Nadie le puede reprochar al cuadro el sacrificio y la entrega que dejó en la cancha. Sería imposible conseguir el objetivo de la permanencia sin esas virtudes aunque quizás solo con eso no alcance.
A pesar de que tuvimos chances para marcar algún gol más, quedó la sensación de que por momentos el partido se peleó más de los que se jugó. Tenemos futbolistas capaces de marcar la diferencia en ataque y es ahí donde tienen que desnivelar más allá cumplir con las obligaciones defensivas que exige el entrenador.
Desde la tribuna muchos pidieron asumir una postura más ofensiva para ir a buscar los tres puntos. Otros no veían con malos ojos sumar uno ante un rival que está entre los de arriba en la tabla.
No debe ser fácil estar en los zapatos de los jugadores ni en el canguro azul de Rosario Martínez a la hora de tomar estas decisiones.
Falta mucho y la pelea en la zona baja de la tabla está muy pareja. Con garra, esfuerzo, actitud, sacrificio y sobre todo con fútbol podemos salir adelante. ¡Vamos la Banda del Ave!
¡No Baja!
PD: Felicitaciones a Rafael García que volvió a jugar un partido después de pasar más de seis meses afuera por una lesión y demostró seguridad cada vez que le tocó participar.
Al igual que contra Juventud, se nos escapó el resultado sobre el final. Ese córner ante River, esa pelota maldita que se metió en nuestro arco luego de un rebote significó un castigo enorme si tomamos en cuenta como se dio el partido.
Hay jugadores con los que uno se emociona al verlos en la cancha. El sacrificio de Liguera, la garra que le pone el “Cacique” Medina a cada pelota, la regularidad de Juan Álvez y lo que mete Gonzalo Papa en el medio son algunos ejemplos del compromiso que tiene este plantel.
Nadie le puede reprochar al cuadro el sacrificio y la entrega que dejó en la cancha. Sería imposible conseguir el objetivo de la permanencia sin esas virtudes aunque quizás solo con eso no alcance.
A pesar de que tuvimos chances para marcar algún gol más, quedó la sensación de que por momentos el partido se peleó más de los que se jugó. Tenemos futbolistas capaces de marcar la diferencia en ataque y es ahí donde tienen que desnivelar más allá cumplir con las obligaciones defensivas que exige el entrenador.
Desde la tribuna muchos pidieron asumir una postura más ofensiva para ir a buscar los tres puntos. Otros no veían con malos ojos sumar uno ante un rival que está entre los de arriba en la tabla.
No debe ser fácil estar en los zapatos de los jugadores ni en el canguro azul de Rosario Martínez a la hora de tomar estas decisiones.
Falta mucho y la pelea en la zona baja de la tabla está muy pareja. Con garra, esfuerzo, actitud, sacrificio y sobre todo con fútbol podemos salir adelante. ¡Vamos la Banda del Ave!
¡No Baja!
PD: Felicitaciones a Rafael García que volvió a jugar un partido después de pasar más de seis meses afuera por una lesión y demostró seguridad cada vez que le tocó participar.