En un encuentro de estrenos y debuts, cuyo mayor atractivo pasó por apreciar el debut oficial de Diego Forlán con la casaca aurinegra y -por supuesto- el comienzo de la denominada "era Acevedo" o, como algunos ya anticipan a llamar, la "ya era Acevedo" en el banquillo de Cerro.

Ninguno de estos condimentos privó a quienes gobiernan el fútbol de hacer todo lo posible para que la gente no vaya a las canchas. Esta vez fueron los directivos de Cerro quienes, fijando precios de ópera, se perdieron de ganar varios miles de dólares.

A este punto uno no se explica si en verdad esta gente conoce la ley de la oferta y la demanda, o si simplemente esconden un deseo inextinguible de ver al mundo ardiendo en llamas como el propio Guasón.

Lo cierto es que onda 15000 personas se dieron cita en el Coloso de Cemento para ver debutar a un futbolista de 36 años que viene de un turbulento pasaje por la B de Japón al precio de un Real Madrid-Bayern Munich en el Bernabéu. Cosas de nuestro fútbol.

¿Y a usted qué le pareció Forlán?

Desde mi punto de vista el hecho de que un futbolista de 36 años que viene de un turbulento pasaje por la B de Japón la rompa, habla más mal de nuestro fútbol que bien de Diego Forlán.

Si bien no tuvo el excelente rendimiento del domingo pasado, sí participó activamente mostrando destellos de su inocultable calidad. Se lo ve en un impecable estado físico y con una precisión tremenda, ya sea con derecha o con izquierda.

Pero el mejor jugador del Mundial 2010 fue tan solo uno de los seis cambios que presentó la oncena mirasol respecto a la del torneo pasado. Vimos también de arranque a Guruceaga, Aguirregaray, Valverde, Ifrán y Nández, haciendo el último de estos un gran partido.

Pero a la hora de inclinar la balanza pesaron las caras viejas, siendo Luis Aguiar el mejor futbolista dentro del campo, mostrando las condiciones físicas a las que llegó sobre fines del Clausura pasado y su excepcional calidad.

El placard lo abrió Diogo Silvestre, otra cara vieja que sigue dando que hablar. Con un potente remate a distancia, puso el 1 - 0 a los 42 del primer tiempo, luego de un tímido arranque por parte del team mirasol.

En la segunda mitad, con el albiceleste ya lanzado al ataque (vale decir que llegó con peligro en repetidas ocasiones), Peñarol tuvo la oportunidad de jugar un fútbol de respuesta, aprovechando los espacios que dejaba Cerro y la velocidad de Ifrán.

El segundo tanto llegó poco después de comenzado el complemento, en los pies del crack de Luis Aguiar, quien remató de primera al borde del área luego de un pase atrás.

Con ese 2 - 0 el equipo de Bengoechea comenzó a sentirse más cómodo en cancha y logró mayor tenencia de balón, aunque no pudo disimular su fragilidad defensiva.

El tercer gol llegó en los pies de ese hombre lobo denominado Nahitan Nández quien, no conforme con haber corrido todo el partido, se lanzó en ataque y provocó en un rebote el 3 - 0 definitivo.

Podemos concluir que aunque nunca viene mal comenzar un campeonato con una goleada, necesitamos de un Peñarol mucho más confiado a la hora de atacar, donde Forlán sea el protagonista y veamos a un Zalayeta más participativo.

A su vez no hemos logrado dar con un modelo defensivo que nos dé garantías: ni Viera ni Mac Eachen me llenan el ojo, y el club no trajo otro zaguero que suplante las bajas de Macaluso y Bizera. Veremos por quién se decanta el técnico el próximo sábado con Mac Eachen a la orden.

Peñarol se vuelve a estrenar con una goleada por parte del mejor plantel del medio. No nos podemos quejar.