Penales y penúltimos
Hubo cuatro penales en un partido que nos dejó penúltimos en la tabla del Clausura.
Foto: AUF
Con la cabeza baja y las esperanzas por el suelo, es que fui a ver a Defensor el domingo. Y es que sabíamos que las chances eran poquísimas y que el partido se iba a tornar difícil de ver. Fue eso y mucho más.
Lo dejamos escapar desde el minuto 1. Fue ahí cuando Cunha cobró uno de los cuatro penales que hubo. Honestamente, sabiendo que a Nacional le cobran siempre penales de todos los colores, hacer este tipo de faltas tontas en el área chica es un error muy infantil que nunca debió pasar. Y menos que menos, pasar dos veces más.
No perdimos por Cunha, que por supuesto que inclinó la balanza en nuestra contra, pero nada tuvo que ver con el bajísimo rendimiento del equipo.
Posiblemente nos estemos enfrentando a la peor defensa del club en años, tenemos jugadores jóvenes que necesitan agarrar mucha experiencia todavía. Ya lo dijo Acevedo, estamos en un momento de transición. Hay que aguantar y esperar. Ya llegará.
¿Lo positivo? El empuje del técnico a pesar de ir perdiendo 4 - 1 y el ingreso inteligente de Romario que le cambió la cara al encuentro. Los últimos quince o veinte minutos nos hicieron ver que hay jugadores que al menos tienen ganas de jugar, pero todavía queda.
Lo dejamos escapar desde el minuto 1. Fue ahí cuando Cunha cobró uno de los cuatro penales que hubo. Honestamente, sabiendo que a Nacional le cobran siempre penales de todos los colores, hacer este tipo de faltas tontas en el área chica es un error muy infantil que nunca debió pasar. Y menos que menos, pasar dos veces más.
No perdimos por Cunha, que por supuesto que inclinó la balanza en nuestra contra, pero nada tuvo que ver con el bajísimo rendimiento del equipo.
Posiblemente nos estemos enfrentando a la peor defensa del club en años, tenemos jugadores jóvenes que necesitan agarrar mucha experiencia todavía. Ya lo dijo Acevedo, estamos en un momento de transición. Hay que aguantar y esperar. Ya llegará.
¿Lo positivo? El empuje del técnico a pesar de ir perdiendo 4 - 1 y el ingreso inteligente de Romario que le cambió la cara al encuentro. Los últimos quince o veinte minutos nos hicieron ver que hay jugadores que al menos tienen ganas de jugar, pero todavía queda.